En lo que a producción porcina se refiere, Alemania ha tenido una posición de liderazgo durante un largo periodo de tiempo.
Hace 10 años se creía que la producción porcina europea se trasladaría hacia el este con Alemania como país principal. Sin embargo, los últimos datos reflejan más bien lo contrario reduciéndose la industria porcina en dicho país.
España, por su parte, que ha sido siempre uno de los principales países productores de cerdo ibérico en Europa ha mejorado los datos de la industria llegando incluso a superar a Alemania.
En tan solo 10años, la producción porcina de Alemania ha pasado de 28 millones a menos de 24 millones de cerdos.
Si nos centramos en el mismo periodo, la producción porcina española creció de 25 millones a 34,5 millones. Este hecho puede atribuirse a menores costes y a integraciones organizadas de forma muy eficiente.
En cuanto a producción se refiere, España superó a Alemania en 2014 aunque las cifras de sacrificios fueron más altas en Alemania. Sin embargo, desde 2020 Alemania ha perdido la posición de liderazgo que tenía y las cifras de sacrificios han ido disminuyendo mientras en España han ido y siguen aumentando desde entonces.
Las causas por las que Alemania ha visto reducida su industria porcina se deben a varios factores simultáneos.
Uno de ellos es la Peste Porcina Africana. Ésta provocó problemas de exportación, lo que dio lugar a una devaluación de la carne de cerdo alemana. Además, se vio agravada por el covid-19 y por el nuevo enfoque sobre el bienestar animal, que ha provocado grandes desafíos para la industria.
Actualmente, y consecuencia de todo ello, la industria porcina alemana se está reduciendo rápidamente, rayando incluso a una situación de mercado que roza la autosuficiencia en Alemania del Este.
A modo de conclusión podemos decir que la producción porcina en Alemania se está reduciendo y se está convirtiendo en un mercado que mira hacia dentro, mientras que en los mercados de los países de alrededor como por ejemplo Dinamarca, todavía se enfocan en las exportaciones.
Por último, cabe destacar que se espera que el número de cerdos en España siga creciendo. Especialmente porque las ventas de carne de cerdo a China han fluctuado en los últimos años. Eso es ventajoso para España, donde los precios de producción son generalmente más bajos que en otras partes de Europa. Según algunos expertos, “competir con España en términos de volúmenes será cada vez más difícil”.