La actividad del sector porcino y del sector primario en su conjunto tiene una gran responsabilidad en la lucha contra el cambio climático, pero también es necesario tener muy presente que somos un sector estratégico fundamental por nuestra función social, económica y vertebradora del medio rural, y que nuestro objetivo final no es otro que ofrecer productos del cerdo seguros, sanos y de calidad para alimentar a nuestros clientes como se merecen.
En la actualidad, las empresas del sector porcino estamos absolutamente comprometidas con la lucha contra el cambio climático. En El Matadero Frigorífico El Navazo hemos potenciado, especialmente los sistema y procedimientos de gestión de los impactos medioambientales derivados de nuestra actividad diaria, así como la transparencia informativa en cuanto a la materia de conservación medioambiental y de sostenibilidad; como la disminución del uso del agua con un resultado muy positivo en la de la energía o las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI).
En cualquiera de los trabajos que realizamos a lo largo y ancho de los 64.000 m2 de instalaciones que disponemos y que hacen de nosotros la planta de transformación y procesado de cerdo ibérico más grande del mundo, somos conscientes de la importancia de la Naturaleza, y de la magnitud y de los impactos ambientales generados por esta actividad. Por ello, decidimos llevar a cabo la implantación de un sistema de gestión ambiental bajo la Norma ISO 14001. Con ella pretendemos proteger el medio ambiente con el uso responsable de cada uno de los recursos naturales que utilizamos en nuestra labor diaria. Además, en El Matadero Frigorífico El Navazo estamos comprometidos con el establecimiento de mejoras y alcance de objetivos ambientales, cumpliendo los requisitos legales y añadiendo aquellos políticas que sean aplicables; como programas de formación de reciclaje para enriquecer las cualificaciones de todos los trabajadores de nuestra empresa
En El Matadero Frigorífico El Navazo somos conscientes de que el planeta tiene una emergencia climática y, con el esfuerzo de todos, debemos aportar soluciones, mientras somos la respuesta a la falta de mataderos, dotados de los medios requeridos, para afrontar las exigencias de calidad a la hora de distribuir y exportar carne de porcino.
Podemos presumir de que apostamos, diariamente, por un modelo de producción exigente en la protección del medio ambiente.